Remontada del Algeciras CF en una noche que sera recordada por todos

A la plantilla del Algeciras Club de Fútbol se le pueden poner muchas pegas, pero si hay algo de la que está sobrada es de pundonor, espíritu de sacrificio y deseo de defender unos colores, los rojiblancos, hasta la extenuación.
Ayer se comprobó en el Nuevo Mirador cuando a los veinte minutos de partido ya perdía por 0-2 goles marcados por Chuli (el primero en el minuto 10 y el segundo en el 18).
Un equipo fragil de moral hubiera arrojado la toalla y pensado que aquello era imposible de remontar. Nada más lejos de la realidad ya que la gente que ayer sacó Diego Pérez 'Yiyi' decidió darle la vuelta al marcador y, despacio pero sin prisas, se puso a ello.

Aunque empezó dominando y creando peligro con un Javi Chico que, en esos momentos, era el rey del centro del campo fueron los onubenses quienes con dos zarpazos consecutivos en tan solo diez minutos se pusieron por delante en el marcador.
En la jugada de ambos goles participaron los mismos jugadores: Bonaque y Chuli que en la expresión máxima del contragolpe dejaron caer sendos jarros de agua fría sobre los aficionados algecireños que, hasta ese momento, se las prometían muy felices.
El Algeciras lo acusó al principio lo que pudieron aprovechar los visitantes para hacer el tercero, pero Mateo lo impidió.
Dejó el Recreativo vivo al Algeciras y eso le perdió, pues al filo del descanso Huelva acortaba distancia y hacía que el equipo de Rosado pasara en el último tramo de este periodo los peores momentos del choque. a segunda mitad empezó algo abúlica hasta que al filo de la hora de partido Yiyi se decidió a mover el banquillo, lo que fue determinante para el resultado.

La entrada de Francis, Dani Venega y Alexis de la Paz le dio otro aire al partido y los locales empezaron a dominar y volver a llevar el peligro a la portería de Sergio, que estaba pasando una noche realmente tranquila.

Primero fue Willy quien marcó su segundo gol, de bella factura, y finalmente Alexis de la Paz quien resolviendo una melé le dio el triunfo a los rojiblancos ante una afición que no se lo creía y que estaba disfrutando como un niño en día de Reyes con su equipo. Una comunión perfecta que ojalá no se rompa en todo la temporada.